viernes, 18 de junio de 2010

Ausencia feliz.

Tomó la mochila con la fortaleza que se gana a punta de golpes en la vida, era el primer acto de valentía en mucho tiempo, programó su canción favorita en el reproductor portátil y pretendió enderezar el destino, hacerle el trabajo al mismísimo Dios, como te confundiste conmigo viejito lindo.

No más semáforos de mierda a las seis de la tarde, ni nuevo día, de mierda también, a las seis de la mañana, si la vida es una sola y no hay opción a repetir para enmendar, me largo, bajo en la esquina, pensó, no me extrañen por la ausencia, recuérdenme por el dolor, dejó escrito en la pared de su habitación, siempre fue amante del drama barato y efectista, pero esta vez, esta vez, iba en serio, la vulgaridad del mundo terminó de llenarle el vaso, Fabián no soportaba un minuto más montado en el caballo salvaje en que se le volvió la vida, desde que empezó a dejar de lado sus sueños y por consiguiente su vida en aquel trabajo, para variar, de mierda.

De chico pensaba: si me pagan bien, que importa, limpio baños con la lengua, ja, que cojudez tan grande, y fue de grande que entendió el karma negativo que encerraban aquellas palabras, entendió que la libertad no tiene precio, que la vida sin hacer lo que te place, es una vida ni siquiera a medias sino a un cuarto, por eso, aquella tarde, tomó la mochila,y partió con su canción feliz en los oídos, con rumbo a cualquier parte, pero lejos, far from here, very,very far.

No dejó dicho dónde, ni si algún día volvería, pero además de la nota en la pared, dejó una sonrisa inmensa en el ambiente, una sonrisa de libertad, que sintieron todos los que luego entraron a su habitación, buscando noticias suyas, partió feliz, atinó a decir su madre, con sentimientos encontrados, de alegría por el hijo fugitivo, al fin, como el quería, y de pena por el hijo ausente.

Nadie lo lloró, al menos los que lo querían bien, sabían que donde estuviera, sería feliz, lejos de esta vida para la que no estuvo hecho y que tanto daño le hizo a diario, Fabián era un alma libre y como tal debía vivir en su propia libertad, sin semáforos a las seis de la tarde ni nuevo día a las seis de la mañana.

8 comentarios:

Luna dijo...

Que vivan las almas libres como las de Fabian...!!!! ¿Quién dice que una mochila tras la espalda es una carga que nos crea ataduras?...error!!! es liberación muchas veces, es lo que nos recuerda que podemos huir, lejos , huir sin regreso y sin mirar atrás...
Dale! toma tu mochilita o palito con tus pertenencias dentro de un pañuelito atada en la punta a lo chavo del ocho, prometo no echarte de menos amigo...me basta tu "ausencia feliz" ....

Erick M dijo...

La mochila es los recuerdos,las penas, alegrias, todo lo que no puedes dejar de llevarte por mas que te vayas lejos, very very far

Angie dijo...

Hey, al fin un comentario!!!. Me gusta este post, no es que los anteriores no me hayan gustado, pero este en particular me resulta bastante familiar, ¿qué puedes perder apostando por ser feliz? después de todo cada uno sabe lo que le hace bien, la verdad no me gustaría pasar los últimos días de mi vida pensando en lo que pude hacer para ser feliz, eso sería muy triste.

Anónimo dijo...

Se me viene a la mente con tu relato una huida fugitiva, si carajo llegó el momento Pacho, tú, shushupe, hugolini, peter y yo, vámonos a un viaje sin programar nada, a un destino q nos aleje a esta ciudad de cemento, donde cada dia sea la eternidad...
SIR LANCELOT

Anónimo dijo...

Felicidad es una percepción de satisfacción máxima en un breve momento de tiempo, si así no lo fuera no existiría la felicidad o peor aun la vida sería una secuencia de sucesos aburridos, mi querido endriago no hay nada mas satisafactorio de hacer lo que quieres o deseas; si la vida no te da exactamente lo que pretendías pues sigue intentando y tambien ser flexibles es el camino para no llegar a ser un "ausente feliz". La vida es un viaje de aprendizaje continuo.

Erick M dijo...

Gracias Angie, ya hacían falta tus comentarios.

Erick M dijo...

Sir Lancelot, Lunahuaná es el destino elegido, gracias por el coment, comunicate con Shushupe, el te dará los pormenores del viaje.

Erick M dijo...

Querido anónimo, la ausencia feliz es el viaje que todos dederíamos hacer al menos una vez cada cierto tiempo,para ordenar las ideas y retomar con mas fuerza la vida.